Un consorcio internacional de especialistas, con participación de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), ha creado una plataforma digital abierta e interactiva que emplea Inteligencia Artificial para apoyar la rehabilitación de viviendas sociales. El objetivo es promover hogares más confortables, sostenibles y preparados frente al cambio climático.
Según informó la UPM, esta herramienta innovadora permite reducir el consumo energético y mejorar el confort térmico en viviendas vulnerables. Para ello, integra algoritmos de aprendizaje automático y modelos energéticos de última generación capaces de analizar miles de alternativas de mejora, desde refuerzos de aislamiento hasta opciones de ventilación o sombra. Tras ese análisis, el sistema recomienda las intervenciones más eficientes, asequibles y sostenibles.
La plataforma combina datos reales de edificios con simulaciones energéticas avanzadas. Esto le permite generar automáticamente numerosos escenarios de rehabilitación y evaluar qué soluciones resultan más adecuadas en función del tipo de inmueble, el clima o el presupuesto disponible. Para seleccionar las mejores propuestas, emplea técnicas de optimización evolutiva inspiradas en la selección natural: prueba distintas combinaciones, compara sus resultados y se queda con las más eficaces, es decir, las que proporcionan mayor confort al menor coste.
De este modo, el sistema examina miles de estrategias —como mejoras en la envolvente térmica, incorporación de ventilación o ajustes en sistemas de protección solar— y determina cuáles ofrecen un rendimiento óptimo. El resultado es una herramienta que facilita una toma de decisiones basada en datos y adaptable a distintos contextos climáticos y urbanísticos.
Una de sus principales ventajas es su carácter abierto y fácil de usar. Según explica su creadora, Carmen María Calama González, la plataforma puede emplearse desde cualquier navegador web, lo que la hace accesible para administraciones públicas, técnicos, investigadores e incluso ciudadanos. Esta accesibilidad favorece la colaboración entre disciplinas y facilita la transferencia del conocimiento científico mediante visualizaciones comparativas de distintos escenarios de rehabilitación.
La iniciativa, desarrollada junto a la Universidad de Sevilla y la Universidad Federico II de Nápoles, pretende dar respuesta a dos desafíos prioritarios en Europa: disminuir el consumo energético del parque edificatorio existente y actuar sobre la vivienda social, donde se concentra la mayor vulnerabilidad económica y energética. Con esta herramienta, señalan sus responsables, se avanza en los objetivos de eficiencia energética y descarbonización impulsados por la Unión Europea, al tiempo que se mejora la calidad de vida y la salud de los hogares más expuestos.
“Este trabajo sienta las bases para herramientas digitales más accesibles y colaborativas que apoyen la transición energética”, concluyen los investigadores.
