ANERR

Zaragoza avanza en el proyecto europeo InCUBE con nuevas obras en Valle de Oza

El Ayuntamiento de Zaragoza ha aprobado el inicio de las obras ordinarias en los espacios exteriores del proyecto piloto InCUBE, ubicado en la calle Valle de Oza (números 1 a 7), en el barrio de El Rabal. Los trabajos cuentan con un presupuesto de 182.356 euros y un plazo de ejecución estimado de dos meses.

Un proyecto europeo de innovación en vivienda

InCUBE, impulsado en el marco del programa europeo Horizon y desarrollado en Zaragoza con el diseño de Metro7, busca dar respuesta a las deficiencias de los edificios en entornos vulnerables mediante soluciones industrializadas e innovadoras. Su objetivo es desbloquear la ola de rehabilitación en Europa con procesos estandarizados que integren energías renovables, digitalización y nuevos modelos de gestión, sin olvidar factores sociales como la inclusión, la perspectiva de género o la mejora de la capacitación laboral.

Además de Zaragoza, este proyecto se está implementando de forma piloto en Trento (Italia) y Groningen (Países Bajos).

Tres ejes de intervención en los edificios

La rehabilitación de los inmuebles de Valle de Oza se centra en tres ámbitos principales:

  • Eficiencia energética, con mejoras en el aislamiento térmico y la incorporación de sistemas de energías renovables.
  • Accesibilidad, mediante la instalación de un nuevo ascensor.
  • Conservación, a través de la renovación de instalaciones y acometidas.

En el exterior, la intervención incluye la adecuación del perímetro del edificio, la ampliación de aceras frente al portal del número 1 —necesaria para instalar el ascensor y cumplir con las dimensiones mínimas de accesibilidad— y la renovación de las acometidas.

Renovación de infraestructuras y acabados exteriores

Las obras también contemplan la apertura de zanjas para el soterrado de las redes de gas y telecomunicaciones en el lado oeste, lo que permitirá centralizar los contadores a nivel de calle. En el lado este, se renovarán las conducciones de agua potable y electricidad.

El proyecto prevé tres tipos de acabados exteriores:

  • pavimento de hormigón impreso en las zonas interiores de la parcela,
  • ampliación de aceras con baldosas de hormigón de 30×30,
  • y 58 metros cuadrados de espacios ajardinados con gravilla junto a los edificios.

Con estas actuaciones, Zaragoza refuerza su papel como ciudad piloto en una iniciativa europea que busca transformar la manera en que se conciben y rehabilitan los edificios en entornos urbanos vulnerables.

Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.

Puedes revisar nuestra política de privacidad en nuestra página de política de privacidad y cookies.