La empresa GarcíaRama ha rehabilitado este edificio situado en la calle Rufo García Rendueles, 13, en la ciudad de Gijón. Se desarrolla dentro del «Plan Especial para el tratamiento de la fachada marítima del Muro de San Lorenzo», promovido por el Ayuntamiento de Gijón, con el objetivo de mejorar la imagen urbana de las fachadas existentes en el Frente Marítimo del Muro de San Lorenzo.
Las actuaciones de rehabilitación que GarcíaRama lleva a cabo en todas las fachadas exteriores de la envolvente térmica del edificio suponen una mejora sustancial en el confort de las viviendas, debido a la instalación de distintas fachadas aislantes en cada una de ellas, así como la sustitución de las carpinterías de viviendas por otras altamente aislantes.
Se trata de una fachada ventilada formada por paños de panel composite de aluminio, en las zonas que quedan entre las ventanas, y paños singulares de vidrio, formando bandas horizontales que dan continuidad a la fachada. Estas bandas de vidrio están formadas por una luna monolítica con capa de control solar, en color verde, templada y opacificada mediante serigrafía en color blanco en la cara dos de la misma. Las piezas de vidrio crean una intrincada forma similar al movimiento de las olas (cada vidrio compone con sus adyacentes unos planos en zigzag al formar un ángulo con estos), dado que el mismo edificio se encuentra ubicado en primera línea de playa, creando así una agradable sensación al espectador, que puede ver cómo según el momento del día, en función de la luz que reciben, se crean diferentes reflejos cambiantes en tono y forma.
Estos vidrios están sujetos mediante un bastidor de aluminio, al cual se consolidan mediante un pegado estructural, que se cuelga sobre unos montantes verticales de aluminio, anclados a su vez al soporte de fachada mediante unas fijaciones especiales. Estas permiten la regulación tridimensional de dicho paño de vidrio, lo cual conlleva un complejo estudio previo de diseño y replanteo de ingeniería eficientemente resuelto para lograr el concepto deseado.
Para separar estas bandas de vidrio del resto de fachada y destacar aún más ese movimiento en zigzag, se han creado unas líneas horizontales que discurren paralelas a la fachada y que crean un ligero vuelo sobre ellas. Para ello se ha utilizado un panel composite de 20 mm de espesor, compuesto por dos láminas de aluminio separadas por un núcleo en forma de celdilla de abeja, también de aluminio, lo que aporta una rigidez y planimetría idónea, permitiendo además su uso en grandes luces en una sola pieza.
*Información seleccionada para la sección «Rehabilitación» de la Revista ANERR news número 11 – Octubre en papel: https://www.anerr.es/revista-anerr-news/